Los cambios en los pechos vienen determinados por numerosas causas. La menstruación, la maternidad, las alteraciones hormonales, el uso de anticonceptivos y las variaciones de peso pueden repercutir en el aspecto de los senos.

Los cambios en los pechos

Cada mujer es singular y tiene una morfología propia, pero de lo que no cabe duda es que unas alteraciones en las mamas son más frecuentes que otras. De algunas no hay que preocuparse y a otras hay que prestar atención y acudir al médico en caso de duda.
Vamos a desgranar los cambios que se suelen dar en los senos, sus posibles causas y sus remedios.

Los pechos aumentan de tamaño

• Normalmente, un incremento de la talla de sujetador va acompañado de un crecimiento del perímetro de la cintura. Es decir, que se ha engordado. Puede que se esté comiendo de más, que se tenga menos actividad o, incluso, que se esté pasando demasiado estrés.
• Es habitual que los pechos se noten más grandes durante los primeros días del periodo. Después, vuelven a ser como siempre.
• En el embarazo el pecho aumenta de tamaño ya que se prepara para amamantar.
• La píldora, el parche o el anillo vaginal hacen que las mamas luzcan más voluminosas por los cambios hormonales que conllevan estos anticonceptivos.

Los pechos disminuyen de tamaño

• Como cualquier parte del cuerpo, los senos disminuyen de tamaño cuando se baja de peso.
• Cuando no se está con la regla, las mamas vuelven a su volumen habitual.
• Al entrar en la menopausia los senos adelgazan porque la producción de estrógenos desciende mucho.
• En el caso de tener los ovarios poliquísticos disminuye el tamaño de los senos.

Un pecho es más grande que otro

• Como todo lo que hay por pares, los pechos nunca son totalmente simétricos. Si cambian de forma y uno es mucho mayor que el otro deja de ser normal y habría que ver cuál es la causa.

Hay bultos en los senos

• Cuando la mama es fibroquística suelen aparecer bultos, sensibilidad al tacto y dolor. Si el bulto es redondo, suave y se mueve, probablemente es benigno. No hay que preocuparse. Sin embargo, si ese bulto es duro y va haciéndose más grande cada vez, puede tratarse de un tumor maligno, es decir, cáncer de mama. En ese caso, habrá que hacer las pruebas necesarias para determinar el grado de malignidad e iniciar el tratamiento que indique el médico.

Dolor en el pecho

• Los cambios hormonales durante el ciclo menstrual hacen más sensibles a los senos y es habitual sentir dolor.
• Una talla de sujetador más pequeña de la que corresponde puede provocar malestar al tener las mamas aprisionadas.
• Un exceso de cafeína puede causar molestias en los pechos.
• Uno de los efectos de la menopausia es el dolor de senos.
• Un fibroadenoma, es decir, un tumor no canceroso puede hacer que duelan las mamas.

Pechos irritados por debajo

• La alergia a la fibra del sujetador puede irritar los pechos por debajo.
• El doblez entre el pecho y la piel de abajo puede rozar y causar una inflamación. Conviene aplicar una crema para atenuarla.

Estrías en las mamas

• Al variar de peso, los pechos aumentan y disminuyen, lo que provoca la aparición de estrías.

Venas muy visibles en los senos

• Los pechos pálidos son muy susceptibles a las quemaduras y a que se vean las pecas y las venas.

Pechos rugosos

• Si los pechos son rugosos, con la areola y el pezón duros, se podría tratar de cáncer. Consultar con el médico.

Presencia de pelos en el pecho

• Cuando se ha extendido crema o gel con testosterona, es decir, con hormonas masculinas, pueden salir pelos en la superficie del pecho.
• Esto también ocurre cuando se tiene un ovario poliquístico.

Picor en los pezones

• Alergia a las cremas, los geles o al material del sujetador.
• Cuando se está a punto de empezar con el periodo puede notarse picor en los pezones.
• Cuando se padece la enfermedad de Paget o carcinoma en los pezones. Esta es una forma muy rara de cáncer.

Pezones oscuros

• Los tonos oscuros de los pezones se deben a los distintos patrones de pigmentación. En general, no hay que preocuparse. También se oscurecen durante el embarazo.

Protuberancias en la areola

• Aunque es normal tener protuberancias pequeñas rodeando las areolas, también pueden ser signo de un quiste benigno o, incluso, maligno. Habrá que vigilarlo.

Los pezones secretan liquido

• Sale un líquido del pezón que no es leche y va acompañado de sangre. Suele aparecer cuando se toman píldoras anticonceptivas o por alguna infección.

Los pezones secretan una sustancia lechosa

• Puede ser respuesta a una estimulación física sin estar embarazada o lactando.
• Por tomar un antidepresivo o antipsicótico que elevan los niveles de prolactina, la hormona que estimula la producción de leche.

Los pezones secretan sangre

• Puedes ser debido a un tumor benigno.