Retocar los pómulos es una de las operaciones más solicitadas en la actualidad. Están de moda los rostros afilados. Una cara en la que se marcan las mejillas siempre resulta más atractiva que una regordeta. Por eso, muchas famosas se quitan el exceso de grasa de esa zona para conseguir unos pómulos altos y perfectos. Esto se hace a través de una sencilla intervención de Cirugía Estética.

Los pómulos en la cara

La estructura ósea de la cara define las facciones de cada persona. Los pómulos son los huesos salientes -conocidos como huesos cigomáticos- que se encuentran bajo los ojos y a ambos lados de la nariz.

Los pómulos cumplen una gran función estética en el conjunto de la cara. Cuando se presentan caídos o planos, harán que el rostro se vea envejecido. Por el contrario, cuando lucen altos y marcados darán un aspecto más juvenil y atractivo.

Realzar los pómulos sin cirugía

Hasta cierto punto, se puede dar más volumen a los pómulos sin cirugía. Pero hay que tener en cuenta que cuando las mejillas son extraordinariamente gruesas o están muy caídas nada dará resultado. Aquí van unos consejillos al alcance de todos que, por supuesto, no son definitivos:

• La gimnasia facial. Trabajando unos cuantos gestos del rostro como inflar los mofletes, masajearlos, pellizcarlos y poner “cara de besugo” pueden ayudar a definir los pómulos. Es muy habitual cuando se hacen los selfies llevar los labios hacia adelante como si se fuera a dar un beso para que se marquen las mejillas.
• El maquillaje. Sabiendo dónde aplicar las sombras y las luces se podrá disimular la “cara de pepona”, todo depende de la habilidad de cada una con los cosméticos.

Retocar los pómulos con Cirugía Estética

Existen algunos tratamientos estéticos que permiten realzar los pómulos durante una buena temporada:

• Las inyecciones de ácido hialurónico. Es una de las técnicas más utilizadas cuando la piel ha perdido firmeza. Sirven para dar mayor volumen en la zona tratada y, a la vez, rellenar las arrugas y las líneas de expresión que tan feo hacen. El inconveniente es que estos fillers son temporales, duran de 6 a 24 meses.
• Los hilos tensores. Cuando se elevan las cejas y se tensa la piel de los párpados se suelen afinar los pómulos de forma indirecta. Los resultados tampoco son definitivos, duran entre 12 y 18 meses, aunque el cuerpo los va reabsorbiendo a los 6 u 8 meses.

Retocar los pómulos con Cirugía Plástica

Si ninguna de las opciones anteriores convence, se puede optar por una sencilla intervención de Cirugía Plástica: la extirpación de bolas de Bichat o bichectomía que da muy buenos resultados.

Las bolas de Bichat son unos cúmulos de grasa situados debajo de los pómulos que dan soporte y estructura al rostro. Su tamaño depende de la cantidad de tejido adiposo de la persona y determina que la cara sea redonda o afilada. Como no tienen ninguna función determinada, se pueden extraer sin problemas.

La bichectomía es una técnica quirúrgica que modifica el óvalo del rostro, estilizándolo. Hay que saber que esta operación no funciona por igual en todas las personas. Si los carrillos no son lo suficientemente gruesos no se logrará el efecto deseado.

El procedimiento consiste en realizar unas pequeñas incisiones en la cara interna de las mejillas para extraer las bolsas de grasa que rellenan la parte inferior de los pómulos. El cirujano retirará la cantidad de grasa necesaria para conseguir un rostro armónico.

La intervención se realiza con anestesia local y dura alrededor de los 30 minutos. Como los puntos van en la cavidad bucal, las cicatrices quedarán invisibles. Los resultados son definitivos, ya que la grasa no se vuelve a reproducir en esa zona. Además, es totalmente reversible, por lo que si la paciente no termina de verse con el nuevo aspecto de su cara, podrá volver a infiltrarse grasa.

Esta cirugía se realiza tanto en hombres como en mujeres de cara redonda, aunque ellas son las que más la solicitan para cumplir con los cánones de belleza establecidos. En pacientes con pieles maduras no se recomienda la bichectomía ya que podrían acentuarse más los rasgos propios de la edad, aunque podrían compensarse de un lifting facial.

Diferencia entre bichectomía y bichatoplastia

No hay que confundir ambos procedimientos. En la bichectomía se extraen las bolas de Bichat, mientras que con la bichatoplastia se hace una resección de las bolsas grasas, haciendo las mejillas menos voluminosas o redondeadas.

Las personas con rostros redondeados y cuadrados son las que más demandan este tipo de intervenciones estéticas para verse más favorecidas. A las caras ovaladas les va bien cualquier look, corte de pelo, peinado o maquillaje. Si no está conforme con el aspecto de sus pómulos, acuda a la consulta de un cirujano plástico para que le aconseje lo mejor.