A todos y a todas nos complacería mostrar el cuerpo sin ningún tipo de pudor pero, a veces, determinados defectos físicos nos impiden llevar la ropa que desearíamos porque se nos notan los michelines, tenemos demasiada barriga o algo de celulitis. Todos estos inconvenientes se pueden solucionar mediante unos retoques de Cirugía Plástica.
Mostrar el cuerpo en público
Atrás quedan los años en que en nuestro país no se permitía mostrar el cuerpo en público. En el mundo occidental, “casi todo” está permitido en la actualidad. Es más, las chicas de mayor éxito suelen ser muy “atrevidas” en su forma de vestir y muchas son conocidas por ello. Sin embargo, no es así en los países árabes, donde las normas son tan estrictas que hasta enseñar el pelo es indecoroso.
En la España franquista se veía con malos ojos que una “señorita de bien” llevara un escote abierto, enseñara los hombros y, menos, las piernas. Las clavículas no podían verse porque eran como dos flechas. Las mujeres estaban sometidas bajo la tutela de su padre o de su marido y no podían hacer nada sin su consentimiento. No había otro modo de vida que resultara decente.
A mediados de siglo XX, estaban despuntando actrices como Rita Hayworth o Marilyn Monroe, que exhibían sus cuerpos con ajustadas prendas. En España se doblaban las películas para que solo se oyera lo que la censura permitía y, además, se modificaban los carteles. Por ejemplo, se complementó el vestido de Rita Hayworth en el póster de Gilda porque resultaba demasiado escotado.
La evolución del traje de baño
Antiguamente, en las playas tanto hombres como mujeres usaban bañadores de lino o algodón de cuerpo entero que, cuando se mojaban, pesaban mucho. Los hombres llevaban una pieza completa de camiseta y pantalón corto, y las mujeres unos vestidos holgados con pantalón debajo.
El ingeniero automovilístico Louis Reard inventó el bikini en 1946, que consistía en dos triángulos que cubrían los pechos y otros dos para la parte inferior. Cuando pidió a las modelos que posaran con la nueva prenda, se negaron porque lo veían escandaloso. Incluso, la actriz acuática Esther Williams y otras compañeras de Hollywood no quisieron usarlo manifestando que con él se sentían desnudas.
La llegada del bikini supuso una revolución no solo estética sino de liberación. En 1953 Brigitte Bardot se atrevió a colocarse el bikini y, tras ella, numerosas actrices hicieron lo mismo. Esto implicó una liberación y el derecho a las mujeres de llevar lo que quisieran, mostrando su cuerpo sin problemas.
El bikini en España
Sin embargo, España no iba a la par en libertades con el resto de Europa. Nuestros 50 y 60 en poco se parecían a los de países como Francia o Estados Unidos. El franquismo impuso una moral cristiana muy recatada donde dejaba claro lo que estaba bien y lo que estaba mal. El Ministerio de Gobernación de 1951 se pronunció con respecto al uso del bikini en un comunicado:
“Queda prohibido el uso de prendas de baño indecorosas, exigiendo que cubran el pecho y espalda debidamente, además de que lleven faldas para las mujeres y pantalón de deportes para los hombres.»
Y, por supuesto, en España estaba terminantemente prohibido hacer nudismo. Sin embargo, hubo algunos sitios como Santander, Benidorm y Marbella que se rebelaron contra la norma y se convirtieron en “zona libre de bikini”. Allí vieron la oportunidad de recibir a las extranjeras que no ponían pegas en llevar esta prenda y el turismo reportaba grandes beneficios a estas ciudades. Los alcaldes de estas ciudades consiguieron convencer al régimen con el argumento del dinero. Entonces, Marbella se convirtió una ciudad de la costa del sol “del glamour y la libertad” en aquellos años y aún le queda algo de aquello…
Mostrar el cuerpo sin complejos
Si tenemos la suerte de tener un cuerpo bonito todo está hecho, pero si no es así, podemos recurrir a la Cirugía Plástica y corregir aquellos defectos físicos que nos acomplejan.
Las principales cirugías que remodelan el cuerpo son:
- La mamoplastia de aumento es una buena opción para dar más significado e importancia a nuestro busto. Unos pechos pequeños no dicen nada.
- La mamoplastia de reducción ayuda a proporcionar nuestros senos. Cuando son demasiado grandes tampoco hacen bonito.
- La mastopexia eleva las mamas caídas por el paso del tiempo, los embarazos o las lactancias.
- La liposucción en distintos lugares del cuerpo (brazos, papada, piernas, trasero, caderas) mejoran la silueta de la mujer eliminando la grasa sobrante.
- La abdominoplastia sirve para quitar los cúmulos adiposos de la zona abdominal, afinando la barriga.
Si no está satisfecho con su silueta, acuda a la consulta de un cirujano plástico para que le aconseje lo más adecuado en su caso. Él sabrá indicarle dónde está el problema y cómo solucionarlo.
0 comentarios