Con el tiempo, la boca tiende a perder volumen y los labios se vuelven más delgados. Una boca carnosa siempre resulta más apetitosa y atractiva. Por eso, muchas personas deciden aumentar el grosor de sus labios mediante Cirugía Estética y, de esta forma, se encuentran más a gusto con su imagen.

Los labios

La boca no solo sirve para hablar, también se utiliza para comer, beber, gesticular y, cómo no, para besar. Los labios grandes son todo un símbolo cargado de differentes sentido, desde la boca rebelde del cantante de los Rolling Stones, a la de Albert Einstein sacando la lengua, la suculenta de Marilyn Monroe o la excitante imagen del labio inferior mordiendo al superior.

Modelos o actrices tan conocidas como Esther Cañadas, Angelina Jolie, Shannon de Lima, Galilea Montijo o Kylie Jenner poseen unos labios absolutamente sensuales que muchas desean imitar. Es indiscutible que gran parte de su atractivo reside en esas bocas tan sugerentes.

El aumento de labios

Además de ceñirse a razones estéticas, se puede solicitar un aumento de labios para corregir alguna asimetría congénita y mejorar de paso la armonía facial. Existen varios tratamientos que se pueden realizar:

• Los rellenos de labios reabsorbibles.
  • El ácido hialurónico. Se inyecta en las comisuras, en el arco de cupido y en el labio inferior. Esta sustancia es una molécula que se encarga de almacenar agua para mantener hidratada la piel y que se encuentra de forma natural en el organismo, por lo que no le resulta extraño recibirla. Con este procedimiento solo se necesita una sesión que dura de 10 a 15 minutos. La boca queda algo inflamada posteriormente, pero a las 24 o 36 horas disminuirá esa hinchazón y enseguida se notarán los efectos.

La ventaja de estos rellenos es que, en caso de que no se esté satisfecho con el resultado, se pueden eliminar, pues son reversibles. Otra ventaja es que ayudan a disminuir la aparición de arrugas en los labios. Su duración es de entre 6 a 24 meses, después habrá que volverán a aplicar esas inyecciones.

• Transferencia de grasa del propio paciente. Se extrae de aquellos lugares donde le sobre como el abdomen, los muslos o las nalgas.
  • Colágeno.  Es otra opción para rellenar los labios.
• Los rellenos de labios semipermanentes. Hay unas cuantas sustancias que se pueden aplicar: Hidroxiapatita de calcio, ácido poliláctico, β-fosfato tricálcico con ácido hialurónico (todos ellos son biodegradables) y polimetilmetacrilatos (no biodegradable).
• Los rellenos de labios permanentes. Hay quienes no desean estar recibiendo tratamientos cada cierto tiempo y optan por algo más permanente.Por ejemplo, el gel de poliacrilamida que es biodegradable y, si no, por la silicona, que suelen dar un aspecto ligeramente artificial e, incluso, pueden originar algún problema al cabo de los años, además no es degradable.

Riesgos del aumento de labios

Siempre y cuando se lleve a cabo por un especialista, en una clínica certificada y con los medios adecuados, el aumento de labios no tiene por qué entrañar riesgos y ofrece unos resultados satisfactorios. Sin embargo, como en cualquier otro procedimiento estético, puede ocurrir que surja alguna infección posterior. Es normal que los primeros días haya hinchazón y algún hematoma que irá despareciendo al poco tiempo.

Experiencias. El aumento de labios

Detallamos a continuación unos cuantos testimonios de personas que han decidido realizarse un aumento de labios y explican su grado de satisfacción:

• Jennifer, 38 años. “He de reconocer que mis labios eran tan finos que no decían nada. Cuando me hice ese aumento me encontré mucho más cómoda y sexy. ¡Lo recomiendo!”
• Maika, 20 años. “Me decidí a aumentar los labios porque veía que algunas de mis amigas tenían mucho más éxito que yo y, sinceramente, no eran mucho más guapas. Aunque parezca mentira, la clave era la boca, la mía era absolutamente insignificante.”
• Mónica, 23 años. “Me sentía acomplejada porque mis labios eran como dos líneas sosas, sin ninguna gracia en mi cara. Gracias al tratamiento de ácido hialurónico tengo una boca con la que me veo muy bien.”
• Anabel, 18 años. “Cuando le planteé a mis padres que quería hacerme un aumento de labios, me contestaron que eso no tenía tanta importancia, pero en cuanto vieron los resultados y mi felicidad, no dudaron en que tomé la decisión correcta.”
• Luisa, 62 años. “Cuando me separé, hace 6 años, empecé a verme vieja, algo descuidada y pensé que tenía que hacer algo para sentirme más segura de mí misma y así atreverme a buscar una nueva pareja. Una de las cosas que más me preocupaba eran los labios, que eran muy menudos, nada sexis. Por eso, me decidí a inyectarme ácido hialurónico en la boca y ahora me veo mucho mejor.”

Si usted posee unos labios insignificantes y se está planteando dotarles de mayor sensualidad, no dude en acudir a una consulta de Cirugía Plástica y Estética para que le expliquen el procedimiento que le ayudará a conseguir esa boca deseada.