La Cirugía Plástica de piernas abarca una serie de procedimientos que sirven para mejorar la apariencia estética y funcional de las extremidades inferiores. Estas intervenciones se pueden realizar por una razón puramente estética o para solucionar determinados problemas médicos.

Tipos de Cirugías Plásticas de piernas

Son numerosas las intervenciones que se llevan a cabo en los miembros inferiores:

• Liposucción. Elimina el exceso de grasa localizada en áreas de las piernas como los muslos (internos y externos), las pantorrillas o las rodillas consiguiendo una apariencia más delgada y contorneada. Indicada para pacientes con cúmulos de grasa que no consiguen eliminarlos con ejercicio ni dieta. Existen tres variantes:
  • Liposucción tradicional. Se realizan unas pequeñas incisiones a través de las cuales se inserta una cánula para succionar la grasa. La recuperación es rápida, normalmente de una a dos semanas.
  • Liposucción asistida por láser. La ventaja es que el láser licúa la grasa antes extraerla, acelerando la recuperación y haciendo que aparezcan menos moratones.
  • Liposucción asistida por ultrasonido. Se emplean ondas ultrasónicas para romper las células grasas antes de su eliminación.
• Lifting de muslos (cruroplastia). Mediante este procedimiento se elimina el exceso de piel y grasa para tensar y mejorar el contorno de los muslos. Es perfecta para las personas que tienen la piel flácida debido a pérdida significativa de peso o al envejecimiento. Según la zona, se puede realizar de tres maneras:
  • Lifting interno de muslos. Enfocado a la parte superior interna de los muslos.
  • Lifting de muslos vertical. Se hace una incisión desde la ingle hasta la rodilla, para casos de exceso de piel más severos.
  • Lifting externo de muslos. En la parte externa y lateral de los muslos. Se realizan incisiones en la ingle, extendiéndose a veces hacia la parte interna del muslo.

La recuperación es medianamente rápida, teniendo en cuenta que hay que restringir las actividades físicas durante varias semanas.

• Implantes de pantorrillas. Se insertan implantes para aumentar el volumen y mejorar la forma de las pantorrillas. Es ideal para aquellos pacientes que tienen unas pantorrillas escuálidas. Se practican unas incisiones pequeñas detrás de la rodilla para colocar las prótesis de silicona dentro del músculo gastrocnemio, proporcionando una apariencia más natural. El tiempo de recuperación es de una a dos semanas, con restricciones de actividad física.
• Escleroterapia. Trata las venas varicosas y las arañas vasculares de las piernas inyectando una solución esclerosante que las hace desaparecer. Está indicado para los pacientes que tienen venas varicosas dolorosas o antiestéticas. La recuperación es rápida, el paciente se podrá incorporar a sus actividades normales casi de inmediato.
• Cirugía reconstructiva postraumática. Se realiza tras lesiones graves que afectan a la estructura y la funcionalidad de las piernas. Dependiendo de la lesión, puede necesitar injertos de piel, una reconstrucción ósea o el uso de colgajos musculares. La recuperación es lenta y puede requerir rehabilitación.
• Rejuvenecimiento de rodillas. En las rodillas se pueden realizar procedimientos como la liposucción, la eliminación de piel sobrante o tratamientos con láser para reducir las arrugas y mejorar su apariencia general.
• Transferencia de grasa. También conocida como lipoinyección, este procedimiento extrae grasa de una parte del cuerpo (como el abdomen) para trasladarla a las piernas y así mejorar su volumen y el contorno. Es una opción para quienes no quieren colocarse implantes.

Cosas a considerar y riesgos de las Cirugías Plásticas de piernas

Es muy importante que antes de que se realice cualquiera de estos procedimientos, el cirujano determine la idoneidad del paciente. Para ello, examinará su historial médico, le realizará una evaluación física global y le aclarará las expectativas.

Como en todas las intervenciones existen ciertos riesgos, aunque no es lo habitual:

• Infecciones.
• Cicatrices. Dependiendo del tipo de cirugía, las cicatrices pueden ser visibles.
• Asimetría. Resultados desiguales que pueden requerir corrección adicional.
• Trombosis venosa profunda. Riesgo de formación de coágulos sanguíneos.

Recuperación y cuidados postoperatorios de las Cirugías Plásticas de piernas

Tras la intervención se recomiendan unos cuidados postoperatorios:

• Reposo. Periodo de descanso y limitación de actividades físicas.
• Cuidado de las incisiones. Mantener las áreas limpias y secas para evitar infecciones.
• Seguimiento médico. Consultas regulares para monitorear la recuperación y resultados.

Beneficios de la Cirugía Plástica de piernas

Someterse a una Cirugía Plástica de piernas no solo reporta beneficios estéticos, ya que mejora de la apariencia de las mismas, sino que también pueden ser funcionales. Además, suelen suponer un incremento de la autoestima y un bienestar psicológico al mejorar la percepción del propio cuerpo.

La Cirugía Plástica de piernas ofrece buenos resultados tanto estéticos como funcionales. Es fundamental que el cirujano haga una evaluación física de su paciente y le explique bien todo para que las expectativas sean realistas y los riesgos sean minimizados. La elección del médico y el seguimiento de las recomendaciones postoperatorias son claves para el éxito del procedimiento y la satisfacción del paciente.