La Cirugía Plástica de abdomen, también conocida como abdominoplastia o tummy tuck, es un procedimiento quirúrgico diseñado para mejorar la apariencia del vientre. Se suele realizar para eliminar el exceso de piel y grasa, y en muchos casos, para restaurar los músculos debilitados o separados, creando un contorno de la “barriga” más suave y firme. Se realiza especialmente después de una pérdida significativa de peso o tras el embarazo donde los músculos abdominales se suelen ver afectados.

Tipos de abdominoplastia

Hay tres tipos de Cirugía Plástica del abdomen, atendiendo al alcance de la operación. El médico será quien valore lo que procede en cada caso y el paciente será quien acepte la propuesta.

• Abdominoplastia completa. Esta es la intervención más común. Se realiza una incisión en la parte inferior del abdomen, de cadera a cadera, y otra alrededor del ombligo para reposicionarlo después de tensar la piel. Es ideal para personas con gran exceso de piel y grasa.
• Miniabdominoplastia. Este procedimiento es menos invasivo que la abdominoplastia completa. Se realiza una incisión más pequeña y se centra en el área inferior del abdomen. Es adecuado para personas con menor exceso de piel y grasa.
• Abdominoplastia circunferencial. También conocida como abdominoplastia extendida, esta técnica es ideal para personas que han perdido una cantidad significativa de peso. Se elimina el exceso de piel y grasa no solo del abdomen, sino también de la espalda baja y de los costados.

Proceso quirúrgico de la abdominoplastia

Para llevar a cabo la abdominoplastia lo habitual es seguir estos pasos:

• Consulta previa. Todas aquellas personas que se estén planteando someterse a una intervención quirúrgica, es imprescindible que acudan a la consulta de un cirujano plástico para obtener el máximo detalle de los procedimientos. Por un lado, el médico evalúa el estado general de salud del paciente, examina su historial médico y entre ambos discuten los objetivos a conseguir. El cirujano tiene obligación de explicar los posibles riesgos, cada uno ha de exponer sus expectativas y conocer los cuidados pre y postoperatorios que conlleva.
• Anestesia. La cirugía normalmente se realiza bajo anestesia general, aunque en algunos casos puede utilizarse local con sedación.
• Procedimiento. Dependiendo del tipo de abdominoplastia elegida, el cirujano realiza las incisiones necesarias, elimina el exceso de piel y de grasa, y si es necesario, repara los músculos abdominales. La duración puede variar entre 2 a 5 horas. Durante la intervención se colocan drenajes temporales para evitar la acumulación de líquidos bajo la piel.
• Cierre de incisiones. Una vez terminado el procedimiento, las incisiones se cierran con suturas, adhesivos o clips quirúrgicos según crea conveniente cada especialista.

Recuperación de la abdominoplastia

Como todas las intervenciones que requieren anestesia y hospitalización hay que tener paciencia y seguir los consejos dados por los médicos.

• Hospitalización. Dependiendo del alcance de la cirugía, el paciente puede necesitar una breve hospitalización o se le puede dar el alta el mismo día.
• Tiempo de recuperación. La recuperación completa de una abdominoplastia puede variar, pero generalmente se requiere entre 2 a 4 semanas antes de retomar las actividades normales. Es común experimentar hinchazón, dolor y molestias durante los primeros días. El uso de una faja compresiva es necesario para ayudar a reducir la hinchazón y dar soporte al abdomen mientras se cura. Los resultados finales pueden tardar varios meses en ser visibles, ya que la inflamación disminuye poco a poco. Durante este tiempo es fundamental evitar actividades intensas y, ante todo, seguir las indicaciones del cirujano.
• Cicatrices. Las cicatrices que se generan en esta intervención suelen ser permanentes, aunque se van desvaneciendo según pasa el tiempo. También se pueden tratar con láser o mediante la aplicación de cremas especiales para mejorar su apariencia.

Resultados de la abdominoplastia

Los resultados de la Cirugía de abdomenson satisfactorios y ayudan a la autoestima de las personas.Normalmente son duraderos siempre y cuando se mantengan hábitos saludables. Es fundamental llevar una buena dieta y realizar ejercicio de forma continuada para conservar la línea. Si uno se abandona es fácil que esa barriga que tan poco gustaba vuelva a aparecer.

Riesgos de la abdominoplastia

La abdominoplastiapuede entrañar ciertos riesgos, aunque no es frecuente. El médico tiene que informar al paciente tanto de lo bueno como de lo malo, por si se da una situación adversa. Por ello, el paciente siempre firma un consentimiento informado. Como cualquier cirugía, la abdominoplastia conlleva peligros como la infección, los sangrados, los problemas de cicatrización, la acumulación de líquidos o los cambios en la sensibilidad de la piel.

La abdominoplastia puede ofrecer una mejora significativa en la apariencia del abdomen, especialmente para personas que no han logrado los resultados deseados a través de la dieta o el ejercicio. Sin embargo, es importante tener unas expectativas realistas y consultar con un Cirujano Plástico certificado para evaluar si esta es la opción más adecuada.