Muchas ocasiones no atendemos la parte superior del rostro como debiéramos mientras que nos centramos en otras zonas como los ojos o la boca. Con el paso del tiempo la frente va presentando arrugas o manchas que delatan la edad. Es posible atenuar esas marcas siguiendo ciertos cuidados e, incluso, apoyándonos en la Cirugía Plástica y Estética si es necesario.
La frente es una y grande
La frente es la porción de la cara que va desde la línea del cabello hasta las cejas y sus laterales se denominan sienes. Puede ser más o menos amplia y se dice que cuanto más ancha sea, más habilidades tendrá la persona y mejor sabrá afrontar las dificultades en la vida.
En general, según se van cumpliendo años, el pelo de la cabeza se va despoblando y surgen las típicas entradas. En los hombres se suele emplear el eufemismo “frente despejada” para referirse a la calvicie. Este caso es difícil de resolver a no ser que se opte por el trasplante de pelo siempre que haya un lugar de donde sacar los folículos pilosos.
Cuando la frente es extraordinariamente ancha y la línea del cabello empieza muy atrás no queda nada bien pero es posible disimularlo mediante el peinado adecuado. Con solo dejar caer unos mechones en la frente o marcar un buen flequillo se reducirá esa distancia y se dará gracia al rostro.
Igualmente, se puede ocultar el “pico de viuda” que aparece en el medio de la frente llevando el pelo hacia adelante. Este nombre se ha adoptado por la capucha que llevaban las mujeres que habían enviudado y les quedaba un pico de tela en el centro de la cabeza.
¡Ay, madre, la frente!
Perfilar los ojos para potenciar la mirada, marcar las mejillas y dar carnosidad a los labios sin duda resaltan la belleza de cualquier rostro, pero si se abandona el resto del óvalo facial, como la frente, se desmerecerá el conjunto. Será cuando los demás dirán al vernos: ¡Ay, madre la frente!
Esto se hará más evidente si además se han eliminado las patas de gallo o las bolsas bajo los ojos, se han resaltado los pómulos o se ha suprimido el código de barras. Hay que cuidar por igual todos los rasgos de la cara para lucir lo más jovial posible y que no se noten esos retoques realizados en el quirófano.
Sudando la frente
El emoticono que simboliza un alto esfuerzo se representa mediante una cara con una gota en un lateral de la frente. Cuando se suda mucho, por ejemplo, ante un calor excesivo o al practicar deporte, es normal que las gotas desciendan por la frente. Las cejas sirven para que esa sudoración no llegue a los ojos y se encargan de desviarla hacia las sienes.
Lo mismo sucede al tomar comidas excesivamente picantes o durante la menopausia donde se producen repentinas subidas de temperatura. No hay que preocuparse siempre que la sudoración surja en estos supuestos, pero cuando se da “sin ton ni son” será conveniente consultar con un médico.
Previniendo las arrugas en la frente
Aunque no hay nada que impida del todo la aparición de arrugas en la frente sí hay unas cuantas cosas que podemos hacer para retrasarlas o atenuarlas.
- No exponernos mucho a los rayos ultravioleta. El sol envejece mucho el cutis y contribuye a que salgan arrugas.
- Hidratar la piel todo lo que podamos. Es importante beber mucha agua y se notará en la piel.
- Utilizar cremas regeneradoras y antiarrugas. Retrasarán el aspecto envejecido de la frente.
- Controlar las emociones. Es importante no gesticular demasiado ni fruncir el ceño continuamente para que no se queden esas rayas.
- Llevar una dieta equilibrada. Evitar el exceso de grasas y centrarnos en el consumo de verduras y frutos secos, que tienen propiedades antioxidantes.
- No fumar. El tabaco envejece toda la piel del cuerpo.
Haciendo frente a las arrugas con la Cirugía Plástica y Estética
Tener arrugas en la frente o el ceño fruncido contribuyen a que la persona parezca estar permanentemente cansada, enfadada o triste. Para ello, existe un procedimiento quirúrgico denominado lifting frontal que consiste en estirar y eliminar el exceso de piel de esa zona.
Muchas veces, ya que se entra en el quirófano puede combinarse esta intervención con alguna otra como la elevación de cejas o el retoque del párpado superior. Todas ellas harán que se rejuvenezca el rostro en su totalidad y se tenga una expresión más suave.
En la operación, que suele durar entre una y dos horas, se realiza una incisión por detrás de la línea del cuero cabelludo, por lo que no se notarán prácticamente las cicatrices. Otra forma de llevarla a cabo es utilizando el endoscopio, practicando unas 4 o 5 pequeñas incisiones. Los resultados son muy buenos.
Si ha observado cómo su frente se halla deteriorada por el paso del tiempo, consulte con un cirujano plástico para que le explique la mejor forma de deshacerse de esas arrugas que le dan un aspecto avejentado a su rostro.
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