Como todos los años con la llegada del verano llegan también algunas preocupaciones sobre nuestro comportamiento frente al sol y no está demás leer algunos consejos que tal vez ya hayamos oído más de una vez.

Aunque aplicar el sentido común puede ser el mejor, hoy os propondremos unos cuantos consejos para la piel en verano y el primero de ellos tal vez os sorprenda:

1.  DEJAR DE FUMAR. El  tabaco combinado con el sol puede dar unos resultados nefastos para la piel. Hemos oído que el colágeno forma parte de la mayoría de las cremas de belleza del mercado, pues bien el colágeno es una proteína que está en nuestro cuerpo de manera natural y que ayuda entre otras muchas cosas a la elasticidad y protección de la piel y es aquí donde interviene el tabaco, destruyéndolo. Pero no solamente destruye el colágeno también es responsable de una más baja producción de elastina,  oxígeno y otros nutrientes que afectan directamente a la piel.
   Al tener más desprotegida la piel los efectos del sol se multiplican. Por si esto fuera poco, la nicotina eleva los niveles de vasopresina que es una hormona que al actuar contrayendo los músculos hace que aumente la presión de la sangre lo que a su vez hace que se reduzca la absorción de la vitamina A y esta vitamina junto con la vitamina C y la E son antioxidantes, muy necesarios contra el sol.
   Podríamos seguir diciendo que el tabaco propicia también la caída del cabello y lo hace más pobre, pero ya os hemos asustado bastante, así es que pasaremos al segundo consejo.
2. USAR PROTECIÓN SOLAR. En nuestro segundo de los consejos para la piel en verano incluiremos tanto la vestimenta, gorros, camisetas, etc. como las cremas de protección solar, que deberán aplicarse al menos media hora antes de la exposición al sol y con un factor de protección elevado.
3. HIDRATARSE CORRECTAMENTE. Esto quiere decir ingerir agua, zumos naturales y evitar el alcohol y la cafeína que reducen el agua.
4. COMER ADECUADAMENTE. Procuraremos tomar menos carne y más verduras, sobre todo aquellas que contienen vitaminas antioxidantes, como las zanahorias, espárragos, brócoli y las frutas de color rojo y también los pescados.
5. EVITAR PRODUCTOS FOTOSENSIBLES. Hay perfumes que lo son, así como también algunos medicamentos. Por supuesto no estamos diciendo que se deje de tomar un medicamento que se necesita, pero sí que hay que tenerlo en cuenta.
6. EVITAR LAS HORAS CENTRALES DEL DÍA. No es lo mismo exponerse al sol durante el amanecer y el atardecer que hacerlo cundo está más alto, la línea que atraviesan los rayos tropezará con más o menos atmósfera que hace de filtro sobre todo para los dañinos rayos ultravioleta.
7. TENER EN CUENTA LA LATITUD Y LA ALTITUD. Al igual que en el consejo anterior no es lo mismo estar a la altura del mar donde hay más atmósfera que filtra los rayos solares que en una montaña a 3000 metros (3000 metros menos de atmósfera). Y tampoco es lo mismo tomar el sol en el ecuador que en un trópico.
8. MANTENER LA PIEL LIMPIA. Sobre todo la cara que es la que más expuesta está al sol para que pueda respirar bien por los poros. Este es el último de nuestros consejos para la piel en verano, pero como hemos dicho al principio aplicar el sentido común.