El proceso de envejecimiento afecta a todas las partes del cuerpo, incluido el cuello. A medida que pasan los años, la piel en esta zona pierde firmeza, aparecen arrugas y otros cambios notables. El empeoramiento del aspecto del cuello es un gran desafío estético, pero la Cirugía Plástica y Estética puede mejorarlo y embellecerlo.

No me gusta mi cuello, de Nora Ephron

La novelista, directora y productora de cine estadounidense Nora Ephron nos habla en su libro No me gusta mi cuello cómo odia envejecer y explica que, a pesar del tinte del pelo, la cinta de correr y las cremas, no consigue que desaparezcan las arrugas de su cuello. La cubierta es muy descriptiva, donde una mujer se está tapando esa zona con un jersey de cuello vuelto.

Con su habitual tono desenfadado escribe: “Cualquier cosa que no te guste de tu cuerpo a los treinta y cinco años te producirá nostalgia a los cuarenta y cinco” o que para saber la edad de una secuoya hace falta cortarla, pero que si tuviera cuello se conocerían sus años. Y tiene mucha razón, los años no pasan en balde, se van notando…

El envejecimiento del cuello

Los principales signos del envejecimiento del cuello son:

• Flacidez de la piel. La pérdida de colágeno y elastina puede provocar una disminución en la firmeza y tensión de la piel del cuello.
• Arrugas. Esas líneas en el cuello, más o menos gruesas, siempre delatan la edad, ya sean horizontales (bandas del cuello) o verticales (cuerdas platismales o cuello de gallo).
• Acumulación de grasa. Las personas obesas suelen experimentar un aumento en el cúmulo de grasa debajo del mentón, lo que da lugar a lo que se conoce como «papada» o «doble mentón».
• Pérdida de definición del contorno. El envejecimiento puede hacer que la línea de la mandíbula y el ángulo del cuello se desdibujen, lo que implica una apariencia menos juvenil.

Causas del envejecimiento del cuello

El envejecimiento del cuello puede atribuirse a una combinación de factores intrínsecos y extrínsecos.

Factores intrínsecos:

• La disminución de la producción de colágeno y elastina, que son proteínas clave responsables para mantener la firmeza y la elasticidad de la piel.
• La reducción de la actividad de las glándulas sebáceas puede provocar una piel más seca y propensa a las arrugas.

Factores extrínsecos:

• La prolongada y excesiva exposición al sol. Los rayos solares son grandes enemigos de la piel, la curten y, además de provocar la aparición de manchas, pueden desarrollar problemas mayores como cáncer de piel. Siempre hay que aplicar un protector solar antes de tomar el sol y evitar hacerlo en las horas centrales.
• El tabaquismo. Fumar es malo no solo para los pulmones, la piel no transpira, adquiere un tono muy feo y envejece rápidamente.
• La mala alimentación. El hecho de consumir dulces y grasas en exceso repercute en el aspecto de la epidermis también.
• La falta de cuidados a la piel. Siempre se notará cuando una persona sigue una rutina de limpieza, exfoliación e hidratación de la piel.

Tratamientos contra el envejecimiento del cuello

Existen diversas opciones para atacar los signos del envejecimiento del cuello:

• Cremas y lociones rejuvenecedoras. El uso regular de cremas y lociones hidratantes que contengan ingredientes como retinol, ácido hialurónico y antioxidantes ayuda a mejorar la apariencia del cuello al estimular la producción de colágeno y promover la hidratación.
• Procedimientos cosméticos no invasivos. Técnicas como la radiofrecuencia, la terapia con láser y la microdermoabrasión pueden utilizarse para tensar la piel, mejorar la textura y reducir las arrugas del cuello.
• Cirugía Plástica. Esta es la solución más rápida y efectiva.

La Cirugía Plástica para mejorar el aspecto del cuello

Estas son algunas de las técnicas que ayudan a mejorar el cuello:

• Lifting de cuello. También conocido como cervicoplastia o ritidectomía, es un procedimiento quirúrgico que ayuda a tensar y reafirmar la piel flácida del cuello. Durante la cirugía se realiza una incisión detrás de las orejas o debajo del mentón para acceder a los músculos y tejidos subyacentes. Luego, se tensan los músculos y se elimina el exceso de piel para lograr un aspecto más juvenil y tonificado.
• Liposucción de cuello. Elimina la acumulación de grasa en el área del cuello y la mandíbula. El cirujano, mediante pequeñas incisiones, inserta una cánula delgada para succionar el exceso de grasa. Esta técnica es indicada para aquellas personas que tienen una papada prominente o un exceso de grasa en esta zona.
• Implantes cervicales. Se colocan implantes en para mejorar la definición y el contorno del cuello. Mejoran la apariencia, especialmente en casos de papada o flacidez muscular.

Es importante tener en cuenta que estos procedimientos quirúrgicos deben ser realizados por cirujanos plásticos cualificados. Por ello, antes de decidirse a entrar en el quirófano se recomienda consultar con un especialista para conocer bien todos los detalles.