La blefaroplastia es una técnica que se encarga de devolver juventud a la mirada o de solucionar ciertos problemas funcionales y de visión. Al igual que otras partes del rostro, en los ojos surgen evidentes signos de envejecimiento que les restan expresión. Las arrugas, las cejas y los párpados caídos, las bolsas por debajo, etc. son algunos de ellos y para mejorar su aspecto, se puede realizar la blefaroplastia, una intervención que da muy buenos resultados.

La blefaroplastia, la cirugía que rejuvenece la mirada

La cirugía plástica de los ojos, también conocida como blefaroplastia, es un procedimiento quirúrgico que busca mejorar la apariencia estética de los párpados superiores e inferiores, así como corregir problemas funcionales relacionados con la visión. El resultado de esta intervención es ofrecer una apariencia más descansada y juvenil a los pacientes.

El procedimiento consiste en eliminar el exceso de piel, grasa y músculo de los párpados superiores e inferiores y reposicionar cuidadosamente estos tejidos. La abundancia de tejido da lugar a párpados caídos, bolsas debajo de los ojos e, incluso, llega a obstruir la visión en los casos más graves que, además de no resultar nada estético, puede suponer un problema para la persona.

Técnicas de la Cirugía Plástica de ojos

La cirugía plástica de los ojos se realiza de forma ambulatoria bajo anestesia local o sedación intravenosa. Existen cuatro procedimientos, dependiendo de la zona donde se quiera atacar:

• Blefaroplastia superior: aquí se realizan incisiones en los pliegues naturales del párpado superior, eliminando la piel y la grasa sobrantes.
• Blefaroplastia inferior: a través de sutiles cortes debajo de las pestañas o dentro del párpado inferior, el cirujano remodela la zona, eliminando o redistribuyendo el exceso de grasa y tensando la piel.
• Blefaroplastia completa: se practica tanto sobre los párpados superiores como inferiores. De esta forma, se rejuvenece todo el área que rodea los ojos.
• Blefaroplastia transconjuntival: se hace para tratar los párpados inferiores sin dejar cicatrices visibles en la piel. El médico realiza incisiones dentro del párpado inferior, eliminando o redistribuyendo la grasa y mejorando la apariencia de las bolsas. Esta técnica es especialmente adecuada para aquellos pacientes que no requieren la eliminación de piel sobrante.

Postoperatorio de la cirugía de ojos 

Después de la blefaroplastia es normal que el paciente experimente hinchazón y moratones alrededor de los ojos. Como tras cualquier operación, hay que seguir las instrucciones del cirujano para que la recuperación sea óptima. Es fundamental la limpieza de las incisiones y los cuidados posteriores. El médico puede recetar analgésicos para aliviar el dolor y aconsejar la aplicación de compresas frías para reducir las molestias y la inflamación. La mayoría de las personas retoman sus actividades normales después de una semana aproximadamente, aunque es posible que deban esperar más tiempo antes de realizar actividades físicas intensas.

Ventajas de la blefaroplastia

Son varias las ventajas de someterse a una blefaroplastia, unas tienen un carácter estético; otras, médico y, las últimas, psicológico.

• Perfecciona la apariencia estética: ayuda a rejuvenecer el aspecto facial, haciendo que el rostro se vea más joven, descansado y revitalizado.
• Corrige problemas funcionales y mejora la visión: en algunos casos, el exceso de piel en los párpados superiores puede afectar la visión, causando dificultad para abrir completamente los ojos. El exceso de piel en los párpados superiores puede interferir con la visión periférica e incluso obstaculizar la visión frontal. La blefaroplastia mejora la funcionalidad visual y la calidad de vida del paciente.
• Autoestima y confianza: muchas personas desarrollan complejo por tener los ojos con bolsas, arrugas y los párpados caídos, lo que les da una apariencia de cansancio constante. Por eso, experimentan una mejora significativa en su autoestima al lograr una mirada más descansada y bonita tras la blefaroplastia.

Resultados de la blefaroplastia

Los resultados de esta cirugía son muy evidentes. Nada tiene que ver el rostro antes y después de la blefaroplastia. Una vez que se han retirado las suturas y ha desaparecido la hinchazón, los pacientes notarán una mejora significativa en la apariencia de sus párpados. Los ojos se verán más jóvenes, frescos y descansados, lo que claramente supone un impacto positivo en la confianza y la autoestima.

Se puede decir que esta es una de las cirugías con resultados muy duraderos, probablemente nunca haya que repetirla, pero nada es para siempre. El proceso natural de envejecimiento hace que el rostro vaya cambiando con loso años, por lo que igual es necesario hacer algún retoque pasado un tiempo. En general, no se suelen hacer hasta después de 7 o 10 años.

La blefaroplastia ofrece una solución efectiva y segura para mejorar tanto la apariencia estética como la funcionalidad de los ojos. Si está pensando en realizarse esta operación, no dude en contactar con un cirujano plástico para que le explique bien en qué consiste el procedimiento.