La Cirugía Plástica en Brasil es de lo más común en la actualidad. De hecho, es el país donde se realiza el mayor número de intervenciones de estética en el mundo después de Estados Unidos. Latinoamérica es una gran consumidora de estos servicios, tanto que se puede hablar de un “turismo estético”. En Colombia y México muchísimas chicas ansían cambiar su aspecto de arriba abajo para ser las más bellas y van a los lugares donde les resulta más económico. La cultura de estos países y el clima tropical (con más meses de sol al año), hacen que las mujeres vayan más descubiertas y necesiten estar contentas con su físico.
El boom de la Cirugía Plástica en Brasil
El bajo coste de las operaciones en Brasil ha impulsado el boom de la cirugía estética y ahora está al alcance de la clase media, conocida como clase C. Según el Gobierno brasileño son unos 30 millones de personas las que salieron de la pobreza en la última década. Estas empezaron a consumir productos y servicios que antes solo estaban reservados para clases sociales con mayor poder adquisitivo. Entre otras cosas, esta clase C ahora puede acceder a la Universidad privada, estudiar idiomas o volar en avión.
La Cirugía Plástica en Brasil tanto para hombres como para mujeres
Las chicas brasileñas desean ser las más explosivas y pasear sus bellos cuerpos por las playas y ciudades. Ellos también quieren estar a la altura y desarrollan los músculos llegando a convertirse en verdaderos culturistas. En Copacabana existen aparatos para hacer ejercicio diseminados por toda la línea de playa. A veces esto no es suficiente y necesitan recurrir a la cirugía plástica. En Brasil las operaciones de estética son casi “una norma” y las practican tanto hombres como mujeres.
Es tan popular que no tienen problemas en reconocer las operaciones a las que se han sometido para mejorar su imagen. Las celebrities explican en las revistas sin ningún pudor lo que se han hecho: lifting, mamoplastia, aumento de glúteos o suministro de bótox. Los actores de las telenovelas realizan cambios quirúrgicos como los personajes que interpretan como parte del guion de los culebrones.
Cada dos minutos un hombre brasileño entra al quirófano para someterse a una cirugía plástica. Es así porque hay una gran aceptación social y se han eliminado muchos prejuicios con respecto al tema. De hecho, Brasil se ha convertido en una referencia mundial en este campo. El culto al cuerpo en esta parte del mundo raya la obsesión, tanto que se ha establecido un sistema que les permita pagar la cirugía estética a crédito.
Las operaciones más solicitadas entre las brasileñas son el aumento de senos y trasero, el retoque de la nariz, el aumento de labios y la liposucción. Entre los hombres se practica con mayor frecuencia la reducción de las mamas (un 80% se realiza en los adolescentes), la liposucción y la cirugía de párpados. La mirada cansada es una de las cosas que más preocupa a los hombres porque les hace parecer más mayores y ahí ser joven y bello es lo más. La franja de edad de los pacientes de ambos sexos ronda entre los 20 y los 50 años.
El trasero bum-bum
En ese país se estila el bikini muy escueto y, para lucirlo, hay que tener un cuerpo 10. No está permitida la celulitis, ni unos senos demasiado pequeños o un culo que no siga sus cánones. Es precisamente en Brasil donde existe la moda del bum-bum, el trasero gigante que se mueve al ritmo de la música. Por eso, una de las operaciones más solicitadas es el aumento de glúteos. Las nalgas, según dicta su estética, deben ser altas, turgentes y grandes.
Esta moda llega a tal punto que se celebra anualmente un certamen llamado Miss Bum-bum, que todas desean ganar para llegar a la fama. Una curiosidad: Suzy Gómez, la vencedora del año 2015, gran aficionada al Barça, se tatuó en el trasero un escudo del equipo y la palabra Messi.
La labioplastia vaginal
Últimamente, en Brasil se ha abierto un debate por la gran cantidad de pacientes que solicitan un rejuvenecimiento vaginal. Algunos opinan que se están pidiendo “vaginas de diseño”, mientras que otros piensan que, si se tiene un cuerpo bonito, los genitales también deben estar en consonancia. Según la ISAPS (Sociedad Internacional de Cirugía Plástica Estética) las mujeres que se sometieron a esta cirugía en 2016 aumentaron en un 80 %. El total de operaciones de labioplastia vaginal llegó a 23.155, representando la mayor cifra del mundo.
En Brasil se han dado algunos casos en que se ha puesto en riesgo la salud de los pacientes porque, aprovechando el tirón, las intervenciones las han realizado médicos no cualificados. Cualquiera que vaya a someterse a una operación de cirugía estética debe consultar con un cirujano plástico reconocido. Con la salud no se juega.
1 comentario
16 agosto, 2023
¿Cuantos cirujanos plásticos certificados hay en Brasil?