Mejorar el aspecto de la cara es un objetivo común en mujeres y hombres. El hecho de que no nos guste la imagen que nos devuelve el espejo muchas veces se debe a que la piel no está cuidada o tiene manchas y arrugas, pero en otras ocasiones es que no estamos conformes con nuestros rasgos físicos. Según el caso, habrá que prestar más atención a la piel, aplicar un tratamiento estético o recurrir a la Cirugía Plástica.

Mejorar el aspecto de la cara. La dermis

Aunque los rasgos de la persona sean bonitos si la dermis se presenta apagada, con manchas y llena de arrugas, dará un aspecto de abandono y cansancio. Siempre se nota cuando alguien ha cuidado su piel.

La dermis es la parte más externa de nuestro cuerpo y está expuesta a todo tipo de agresiones desde la contaminación hasta los factores atmosféricos. Si no se tiene prevención con el sol, la piel se quema y surgen manchas. También influye la comida que se ingiere pues numerosas alergias alimenticias provocan la aparición de erupciones cutáneas.

Para lucir una dermis bonita habrá que seguir estos consejos:

• Llevar una dieta equilibrada intentando evitar el consumo de grasas, azúcares y alcohol. Por el contrario, incluir antioxidantes como las vitaminas C y E, carotenoides y licopeno, que protegen del envejecimiento. 
• Hidratar continuadamente la piel y protegerla del sol para evitar que el cutis quede como si fuera de cuero, impedir la aparición de manchas y el desarrollo del cáncer.
• Si se fuma, abandonar el tabaco porque, además de envejecer la dermis y provocar las arrugas, dificulta la cicatrización de las heridas y favorece el cáncer de piel.

Mejorar el aspecto de la cara. Las manchas

Para eliminar las manchas de la piel ya sean de nacimiento o por otras causas como el sol, las cicatrices o cualquier enfermedad, además de consultar con un dermatólogo, habrá que poner de nuestra parte. Por ejemplo, es fundamental huir de las exposiciones demasiado prolongadas al sol. En las clínicas de estética podrán recomendar:

• El uso de cremas despigmentantes con vitamina C y otras sustancias que bloquean la formación de melanina.
• La aplicación de un tratamiento estético de láser o de fuentes de luz pulsada intensa.
• Hacer un peeling donde se combinen distintos tipos de ácidos y agentes despigmentantes según la patología a tratar.
• Someter a un tratamiento de crioterapia, que usa frío intenso para tratar distintas lesiones de los tejidos.

Mejorar el aspecto de la cara. Las arrugas

Cuando se llega a la mediana edad se empiezan a instalar ciertas marcas en la cara que delatan el paso del tiempo. La frente ya no está tan lisa, se ven patas de gallo a ambos lados de los ojos, arrugas verticales sobre el labio superior, líneas de marioneta en las comisuras de los labios, flacidez, etc. Arrugas aquí y allá repartidas por todo el rostro que nos hacen parecer más mayores.

Para deshacernos de esas feas arrugas hemos de:

• Evitar la exposición prolongada a los rayos solares sin protección (una vez más) porque destruye el colágeno fundamental para mantener la elasticidad de la piel.
• Aplicar cremas rejuvenecedoras aunque se obtengan resultados a medio o largo plazo.
• Recurrir a un tratamiento estético de rellenos como el bótox o el ácido hialurónico.
• Hacerse un lifting facial que estira y mejora los signos visibles del envejecimiento.

Mejorar el aspecto de la cara. Los rasgos físicos

Nadie elige la cara que tiene, es la que nos ha tocado al nacer. Cuando poseemos una nariz demasiado grande, una mirada triste y cansada, una boca pequeña o cualquier otro rasgo que nos incomode, podemos encontrar solución en la Cirugía Plástica.

Mediante la rinoplastia se corrige el tamaño y forma de la nariz, las desviaciones, así como las posibles obstrucciones que impiden a la persona respirar bien. Esta operación puede tener solo un fin estético, funcional o una combinación de ambos.

Los ojos son una parte fundamental en la cara. Si las cejas se han caído y tenemos bolsas bajo los ojos arruinarán por completo nuestra mirada. Con la blefaroplastia se eliminará el exceso de piel en el párpado superior e inferior, rejuveneciendo el rostro en su conjunto.

El aumento de labios también se aborda en el quirófano. Se realiza con implantes de silicona o con la transferencia de grasa propia. Siempre se busca un resultado lo más natural posible.

La mentoplastia es una intervención que mejora la proyección del mentón, ayudando no solo a que la persona se vea mejor sino a que pueda hacer mejor la mordida.

El procedimiento de la otoplastia corrige las deformidades del pabellón auricular así como elimina las llamadas “orejas de soplillo” que tanto complejo provocan. 

Si desea mejorar el aspecto de su cara, adopte los consejos que le hemos indicado anteriormente. Si el problema reside en que no está conforme con algún rasgo físico, consulte con un cirujano plástico.