Operación barriga es lo que muchos necesitamos después de los excesos del verano. Los helados, la cerveza, el tapeo y la inactividad en la playa nos regalan unos kilitos de más. Y esos kilos se localizan principalmente en la zona abdominal. En los hombres suelen quedarse en la barriga y en las mujeres se alojan tanto en el vientre como en las caderas.

¿Cuándo se considera que se tiene barriga?

No hace falta verse como Obelix para reconocer que nos sobra grasa en el abdomen. Entre otras cosas, la ropa lo delata. Un vestido ajustado que marca demasiado o unos vaqueros que no abrochan indican que nos hemos pasado comiendo.

La barriga lleva asociados los odiados michelines o un vientre hinchado. Es la primera en aparecer y la última en desaparecer. Resulta complicado deshacerse de ella si no se tiene cuidado.

¿Para qué sirve la grasa en el cuerpo?

La grasa es una forma que tiene el cuerpo de almacenar energía. Aunque parezca que los dulces son lo peor, cada gramo de grasa aporta 9 calorías, mientras que 1 gramo de azúcar 4 kcal. Las grasas también sirven para asimilar las vitaminas A, D, E y K.

Se ha demostrado que con 15 kilos de grasa el cuerpo humano tiene la energía suficiente para caminar unos 10 días sin ingerir nada de comida. Pero esto no quiere decir que cuanta más grasa se acumule más fuerte se estará. Es lo contrario, su exceso taponará las arterias y pondrá en peligro nuestra salud.

¿Cómo evitar la grasa en el vientre?

La grasa abdominal surge por causas de lo más variadas. Los embarazos, los continuos cambios de volumen, la mala alimentación, la inactividad, la irritación intestinal y la edad no ayudan precisamente a mantener una buena figura.

Es importante cuidar lo que se come para que el organismo funcione bien y el peso sea el apropiado para nuestra complexión. Por ello, hay que saber que las grasas se clasifican en buenas y malas.

• • Las buenas no elevan el nivel de colesterol y cuidan el corazón. Se encuentran en el aceite de oliva o de girasol, las nueces, el aguacate y los alimentos ricos en omega 3 como el pescado azul, las sardinas o el salmón.
• • Por el contrario, las malas aumentan el riesgo de padecer enfermedades cardiovasculares y contribuyen a engordar de forma descontrolada. Productos como los embutidos, la mantequilla, los quesos grasos o la leche entera contienen este tipo de grasas.

Con una dieta equilibrada no se ganan kilos de más. Eso no quiere decir que de vez en cuando no nos demos “un capricho”. Es preferible no picotear entre horas, evitar el consumo de alcohol, azúcares visibles y comida rápida o preparada. Si además de esto, se hace algo de ejercicio y se camina regularmente, se podrá controlar el exceso de grasa en el abdomen.

¿Cuándo es mejor iniciar la operación barriga?

Cualquier momento es bueno para atacar esa barriga no deseada, pero los meses después de las vacaciones son muy adecuados. La principal razón es que de cara al otoño e invierno se va más cubierto y, en caso de recurrir a la cirugía, se pasará mejor el postoperatorio.

En un procedimiento quirúrgico como la abdominoplastia se practica una cicatriz que hay que vigilar. Por ello, se aconseja no exponerla al sol durante y seguir las indicaciones del médico.

¿Cómo conseguir un vientre plano?

Si aun siguiendo una dieta equilibrada, bebiendo agua, consumiendo fibra, caminando y practicando deporte no resulta suficiente para mantener la línea, se pueden contemplar otros métodos. En general, el uso de cremas reductoras, fajas abdominales o comprimidos milagro no suelen dar resultado. Al menos, de manera inmediata.

Actualmente se ofrecen muchas técnicas que no precisan la entrada en el quirófano:

• • El lipolaser. Aumenta la temperatura de las células grasas hasta los 42ºC o 47ºC, dañándolas para que el cuerpo las elimine de forma natural.
• • La radiofrecuencia. Se aplican radiaciones electromagnéticas que rotan las moléculas de grasa. También trata la laxitud de la piel, extrae la piel sobrante y estimula la producción de colágeno.
• • La ultracavitación. Aplica ultrasonidos que hacen vibrar las células de grasa hasta que revientan.
  • La mesoterapia. Se inyectan sustancias para favorecer la movilización de células grasas y la eliminación de grasa.
• • La carboxiterapia. Se inyecta dióxido de carbono en los tejidos subcutáneos para que los vasos sanguíneos se dilaten y se incremente el torrente de sangre en la zona.
• • Los masajes manuales. Requiere varias sesiones para que se note el efecto.
• • El coolSculpting. Genera vacío con unos succionadores para congelar el tejido adiposo sin dañar la piel.

Sin embargo, existen otros procedimientos quirúrgicos más eficaces y a más largo plazo que los anteriores.

• • Liposucción. Elimina la grasa mediante finas cánulas conectadas a un sistema de aspiración. Se debe hacer con cuidado para que no se formen ondulaciones o depresiones. A veces hay que combinar esta técnica con la abdominoplastia para retirar el exceso de piel.
• • Abdominoplastia. En la misma intervención se extirpa la grasa abdominal, se fortalece la pared abdominal y se elimina la piel sobrante.
• • Miniabdominoplastia. A diferencia de la abdominoplastia, esta se centra solo en la zona inferior del abdomen (bajo el ombligo). Elimina la grasa abdominal, retira el exceso cutáneo, sin que se repare la musculatura abdominal. La ventaja frente a la abdominoplastia es que deja una cicatriz menor.