tipos de rostro

Cirugía, Estética

Los tipos de rostro vienen definidos por las dimensiones y las proporciones de todos los rasgos que conforman la cara. Partes fundamentales como la frente, los pómulos o el mentón harán que el rostro tenga una forma u otra. Hay más tipos de los que nos imaginamos y no todas las personas están satisfechas con el que les ha tocado. Para eso existe la Cirugía Plástica que, en su medida, podrá retocar todo aquello que nos incomode.

Tipos de rostro

La importancia del rostro

Lo primero que se ve en una persona es la cara y es lo que se suele recordar de cada individuo, salvo que tenga algún rasgo físico del cuerpo muy sobresaliente. Es más importante de lo que parece tener una fisonomía agradable porque está comprobado que los poco agraciados tienen menos oportunidades tanto en lo profesional como en lo emocional.

Se dice que la cara es el espejo del alma y, en cierto modo es así porque es capaz de expresar multitud de sentimientos: alegría, sorpresa, tristeza, miedo… Con el paso del tiempo los rasgos del rostro se van modificando, aparecen arrugas y todo ello transmite una idea de cansancio y de envejecimiento.

Las imperfecciones del rostro se pueden disimular mediante el maquillaje, el peinado o la barba, pero un tema distinto son los defectos físicos o el deterioro que sufren los rasgos a lo largo de los años. Una nariz torcida o demasiado grande, un mentón saliente o unas bolsas bajo los ojos son firmes candidatos para pasar por las manos de un cirujano plástico.

Los tipos de rostro

Atendiendo a su forma, las caras se pueden clasificar en siete grandes grupos.

  • Rostro redondo. Se caracteriza porque la altura de la cara es casi la misma que la anchura. No existen ángulos, las mejillas se aproximan al mentón y los pómulos son anchos. Este rostro es típico de la juventud, por eso confiere una cierta infantilidad a las personas que ya no son adolescentes.
  • Rostro ovalado. En este caso la cara es más larga que ancha, se marcan mucho las mejillas y tampoco tiene ángulos. El rostro ovalado es el más armonioso ya que se acerca al ideal de belleza de nuestros cánones estéticos.
  • Rostro cuadrado. Este sí es muy anguloso y con rasgos muy evidentes como los maxilares. Aunque este tipo de rostro se asocia a la masculinidad, Audrey Hepburn poseía esa cara cuadrada y era toda una belleza.
  • Rostro rectangular alargado. Con una frente larga, pómulos altos, rasgos no muy marcados y la barbilla más redondeada que el cuadrado.
  • Rostro triangular. Este tipo de cara tiene una frente estrecha y una mandíbula amplia.
  • Rostro de triángulo invertido o en forma de corazón. Los pómulos y la frente son más anchos que la mandíbula, que es extremadamente fina.
  • Rostro hexagonal, en forma de rombo o diamante. Se caracteriza por tener unos pómulos y un mentón muy marcados.

La Cirugía Plástica del rostro

La Cirugía Plástica puede solucionar tanto problemas médicos, como corregir defectos físicos o atender a los gustos de cada uno. El sentido de la estética varía según el lugar y la cultura. Hay países donde se consideran más bellos los ojos redondos y otros donde desearían nacer con ellos achinados. En Asia admiran las narices grandes europeas y en África confinan a las mujeres en granjas de engorde para que adquieran el peso que aquí deseamos perder.

Existen tratamientos estéticos y procedimientos quirúrgicos para todas las partes del rostro. Es posible eliminar las arrugas de la frente y la cara, las patas de gallo o el código de barras. Así como atenuar las bolsas debajo de los ojos y levantar las cejas para rejuvenecer la mirada.

La rinoplastia puede ser una cirugía funcional, meramente estética o una combinación de ambas. En el primer caso se realiza para que la persona respire mejor; en el segundo para satisfacer el gusto de la persona; y, en el tercero, a la vez que se mejora la salud se retoca el aspecto de la nariz.

La forma y el volumen de la boca y los labios también pueden modificarse. También es posible añadir los hoyuelos de las mejillas que tan gracioso hacen al sonreír e, incluso, emular el hoyuelo más famoso de Hollywood, el de Kirk Douglas en la barbilla.

En cuanto al mentón, además de cuestiones de gustos, puede existir un problema físico que impida comer bien. Con la mentoplastia se puede modificar el tamaño y la posición de la barbilla para que haga bien la mordida y, de paso, que armonice con el resto de los rasgos de la cara.

Si tiene algún defecto o problema en el rostro o, simplemente, está deteriorado por el paso del tiempo, acuda a una clínica de Cirugía Plástica para que le ofrezcan la solución a su problema.

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